Hablando con abogados: quién, qué, cuándo, dónde y por qué
A todo el mundo le pasa; la idea de llamar a otra persona por teléfono antes de conocerla es una idea intimidante para mucha gente. Sin embargo, llega un momento en que las circunstancias dictan que debes levantar el teléfono. Aquí hay algunos consejos que debe tener en cuenta para que todo sea fluido y productivo cuando necesite comunicarse con un abogado.
Quién: Elegir al abogado adecuado puede ser complicado. Un buen abogado debería trabajar bien con usted, explicarle las cosas para que comprenda lo que está sucediendo y dirigirlo hacia los mejores resultados. Trata esa primera llamada telefónica como una especie de entrevista mutua en la que tanto usted como el abogado al que llamó pueden evaluar si una relación puede ser beneficiosa para ambos.
¿Qué tipo de ayuda necesitas? ¿Qué tipo de caso desea seguir y cuáles son los detalles? Cuando llame, trate de tener la mayor cantidad de documentación posible relacionada con su caso para que cualquier pregunta que el abogado al que haya llamado pueda ser respondida.
¿Cuándo? ¿Cuándo debería contratar un abogado? Tan pronto como se amenace cualquier tipo de acción legal en su contra. Otros ejemplos de ocasiones en las que debe consultar a un abogado son si se lesiona en un sitio de construcción, si su empleador no le paga horas extras o el salario mínimo o le reduce el salario por debajo del salario mínimo, si recibe algún documento legal por correo, si le piden para firmar cualquier cosa que requiera que usted renuncie a algún derecho o acepte dinero, y muchos más.
¿Dónde estás en el caso? ¿Le han citado para comparecer? ¿Estás simplemente armando algo? ¿Hay una fecha de juicio mañana? ¿Dónde estamos en la línea de tiempo? Necesitamos saber estas cosas.
¿Por qué? ¿Por qué llamar a un abogado? Tienes bastante de que preocuparte. Permítanos quitarle el peso legal de encima para que pueda concentrarse en vivir su vida. Un abogado puede conseguir la justicia que se merece.
Un abogado puede ser su mejor amigo en un momento de necesidad. Sólo recuerde que los abogados también son personas, pero si incluso después de leer este blog sus dedos todavía tiemblan demasiado como para presionar los botones correctos de su teléfono, hay un formulario en línea en esta página que puede usar para contactarnos.